Padres versus profesores
Todas las mañanas me levanto temprano para ir a estudiar a la biblioteca xeral de la USC, últimamente me despierto a eso de las 7.30 si soy capaz, para ducharme, desayunar, y caminar hasta la Porta Faxeira donde Antía me espera con un café para llevar. En ciertos casos no tengo tiempo a desayunar , las 7.30 no es cualquier cosa, por lo menos para mi, así que tomo algo por el camino. Hoy ha sido el caso, solo que robé intencionadamente unas mantecadas de casa.
Al llegar a la biblioteca siempre sigo la misma rutina. Tomo el metro y dedico los diez primeros minutos a leer aquello que me resulta interesante. Suelo detenerme en la sección de opinión, y leer aquellos comentarios de los lectores. Me gusta leerlas todas, incluso aquellas que resultan ser bastante contrarias a mi pensamiento, de hecho, esas me gustan especialmente. Normalmente este ejercicio de lectura del metro me ayuda a conectar con el rollo biblio para estudiar.
Hoy he leído una carta enviada por alguien, mejor así. No supe si reír, si llorar, no supe reaccionar de ninguna manera cínica o de suficiencia para saberme mejor que esa persona.
El tema de la carta... bueno, mejor es decir el título de la carta, porque ya nos refleja sobre lo que voy a dar la paliza a continuación: Otra vez los profesores.
Creo que ya se sabe el asunto, verdad?¿ Hace no mucho la Consellería dedico ampliar el horario escolar en los meses de Setiembre y Junio, quitando el horario de Verano. Al ver el título mi sangre se calentó un poco, porque yo, que siempre he criticado la enseñanza, debo reconocer que mis opiniones sobre la misma han ido cambiando según entré en el mundillo. Si bien, mis opiniones anteriores se basaban en mi propia experiencia educativa y no en el conocimiento real del mundo educativo. Pero vayamos al caso.
La situación es la siguiente. Leo el artículo, y pienso, por qué la gente se empeña en cambiar la vida laboral de los demás a peor y no mejorar la suya? Por qué un maestro debe trabajar más horas, y no los de más menos? Debemos hacerlo sólo para que los explotados se sientan mejor y nos puedan tratar como trabajadores normales? Bueno, no tiene mucha importancia, porque este cambio horario realmente no afecta a los maestros, pero es algo a lo que no le he dado mucha importancia al leer semejantes tonterías.
Esta persona aplaude la decisión por las siguientes razones, bajo el lema "hay que ser realista":
1- "Los padres de hoy en día trabajan mucho", es decir, y digo yo, que no tienen tiempo para coger a sus hijos.
2- "La nueva norma me permitirá ahorrarme un buen dinero en la cuidadora a la que acudo cada verano por esas fechas", lo cual no sé si creérmelo, pero no voy a entrar a todo, no¿?´
3- "Todos los padres estarán de acuerdo con una norma que ayuda a conciliar la vida laboral y familiar", lo cual es una suposición personal y contradictoria, digo yo. Suposición que será como la de la Consellería, que atiende a las razones de padres y no de los maestros o pedagogos, que de eso no saben. Así es el mundo de hoy, todos nos automedicamos.
Pero la reflexión mejor es la última: "Los profesores se quejan, pero claro, ellos sí que pueden cuidar de sus hijos". Mantengo mis reservas ante esta observación, y no voy a entrar en el estereotipo que pone encima de la mesa el autor/a de la carta. Pero yo podría hacer lo mismo con médicos, enfermeras, amas de casa, empresarios, políticos y muchos más.
Quisiera decir unas cuantas cosas.
Para empezar, muchísimos maestros, pedagogos, psicólogos, etc. están trabajando cambiando la concepción de la escuela tradicional, por una escuela nueva, constructivista (hacer conocimiento, significatividad,...), donde no reine el conductismo que tan buenos resultados dió en épocas anteriores para dominar la educación a su antojo. Estas personas, al igual que un currículum que se declara que parte del constructivismo Piagetiano, de Vygotsky y Ausubel (el que quiera saber lo que implica eso que busque en la red), defienden una enseñanza de aprovechar el momento de escuela como momento educativo. En cambio, todas las personas que apluden esta norma están aplaudiendo una escuela de carácter asistencial, donde lo único que importa es tener a los chavales encerrados mientras los papis trabajan. ES una medida que de ser tomada por la escuela sería profundamente criticada, pero al ser por conveniencia de los padres, es una medida adecuada. Esta medida no responde de ninguna manera a un carácter pedagógico, pero eso no le importa en absoluto a los padres, por lo que veo. Conclusión, si esta medida debe ser tomada, habría que planificarse correctamente y no precipitada sin tener en cuenta la opinión de maestros. Y por cierto, si realmente queremos la escuela asistencial, entonces debemos rebajar las expectativas de lo que esperamos de la escuela.
Otra pregunta, ¿se toma esta medida por el bien de los niños?, o estamos en una pelea en la que se defienden los intereses de maestros versus padres sin tener en cuenta a los chavales. Yo como futuro maestro, prefiero defender a los niños, aunque ahora critique esta carta.
Desde luego que las razones son realistas, pero probablemente equivocadas.
Dejo para otro día el tema del tiempo real que le debe dedicar a su aula un maestro.
Si yo fuera padre, movería ficha... hacia el interés de mi hijo.
3 comentarios
yo -
HELENITA -
Antía -